Ingredientes:
1 sobre de gelatina de fresa
300 ml de nata para montar
300 ml de agua
150 gr de queso de untar
salsa de fresas:
100 gr de fresas frescas
2 cucharadas grandes de azúcar
Preparación:
Calentar el agua en un cazo y apartar antes de que hierva.
Añadir el sobre de gelatina, remover hasta que la gelatina se disuelva y dejar reposar hasta que este fría pero que no este cuajada.
Añadir en un cuenco la nata y el queso, que estén muy frío, montar a baja velocidad para que no se corte.
Parar de batir cuando la nata este montada y reservar.
Añadir la gelatina poco apoco a la nata con el queso, removiendo despacio con un batidor de varillas continuamente, hasta incorporar toda la gelatina.
NO MEZCLAR A VELOCIDAD ALTA, si lo haces, se cortara la crema.
Untar un molde grande o moldes individuales con aceite de girasol para poder desmoldar mas fácilmente.
Llenar el molde o moldes con la gelatina, introducir en el frigorífico durante 4 o 5 horas, antes de comerlo.
Mientras se enfría la crema, preparar la salsa de fresa.
Introducir en un cazo las fresas con el azúcar, ponerlo al fuego, dejar hervir 2 minutos, apartar del fuego, triturar, pasar por un colador para retirar las semillas y dejar enfriar.
Desmoldar el postre, añadir por encima un poco de salsa y servir
NOTA: Con estas medidas he hecho 5 moldes de 210 ml.
Si lo haces, en un molde grande, moja la hoja del cuchillo antes de cortarla, para que no se pegue.
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