Ingredientes:
225 gr de harina de fuerza
12 gr de levadura fresca de panadero
80 gr de mantequilla
40 gr de azúcar
3 huevos grandes
Almíbar:
1 l de agua
400 gr de azúcar
150 ml de licor, kirsch (licor de cereza) Anís ó ron añejo
Moldes para flanes
Mantequilla
Harina
Horno a 180 grados arriba y abajo
Preparación:
Untar con mantequilla los moldes, espolvorear con harina y
dejar en espera.
Dejar a temperatura ambiente la mantequilla y los huevos, dos horas antes de utilizarlos.
Batir los huevos y dejar en espera.
En el bol de la amasadora poner toda la harina, la sal, un poco del huevo
batido y amasar hasta que la harina absorba todo el huevo, ponemos un poco mas
de huevo y seguimos amasando.
Añadir la levadura desmenuzada, amasamos hasta que la
levadura esté bien mezclada, la masa quedará con aspecto arenoso.
Añadimos el huevo que nos queda poco a poco y seguimos
amasando, añadimos el azúcar y seguimos amasando hasta que el azúcar esté
integrada en la masa.
Añadir poco a poco la mantequilla y seguimos amasando,
cuando la masa tenga un aspecto liso y se empiece a separar de las paredes del bol dejar de amasar,
la masa estará lista.
Untarse las manos con aceite y tomar porciones de la masa y
rellenar un tercio de los moldes, cuando estén todos rellenos dejar fermentar
hasta que doblen de volumen, el tiempo de fermentar dependerá de la temperatura que haga en la casa.
Con el horno ya caliente introducir la bandeja con los moldes.
Hornear hasta que estén dorados, durante 10 ó 15 minutos más o
menos, el tiempo dependerá de cada horno.
Sacar del horno desmoldar y dejar enfriar encima de una rejilla.
Mientras se enfrían vamos preparando el almíbar.
Poner una olla amplia al fuego con el agua y el azúcar, cuando el azúcar se haya disuelto dejar hervir durante 5 minutos, retiramos la olla del fuego
y la ponemos en un recipiente más grande y le añadimos el licor, dejamos que baje la temperatura hasta que esté templado.
Cuando el almíbar esté templado introducimos los pastelitos
y los dejamos dentro un minuto procurando que estén sumergidos en el líquido,
pasado el minuto los sacamos con cuidado con una espumadera y los volvemos a
poner dentro de los moldes.
Si sobra almíbar añadir a los pastelitos cuando estén en el
molde.
Estos dulces tienen que estar muy mojados para que estén realmente
buenos.
NOTA: se sirven solos
o acompañados de nata, crema pastelera ó merengue, aunque sin nada están buenísimos.
Si los moldes son de silicona no hace falta untar los moldes con mantequilla y harina.